El Ministerio Público Fiscal de Salta informó esta madrugada, a través de la red social Twitter, que la beba fue encontrada abandonada a la intemperie, en un asentamiento de la ciudad de Tartagal.
La pequeña fue reconocida por sus padres y se le iniciaron estudios para verificar su estado de salud.
La encontró un vecino en un baldío del barrio Roberto Romero. Inmediatamente se comunicó con las autoridades, que al llegar constataron que la pequeña estaba «en estado de abandono con un grado de hipotermia y sin rastro de sus captores».
Según denunciaron los directivos del hospital, el secuestro fue realizado por una pareja que tomó a la beba, le cambió la manta rosa por una celeste y huyó rápidamente del centro de salud. Hasta el momento, no hay detenidos, pero se especula que los raptores la abandonaron en ese sitio debido a la repercusión que tomó el caso.
LA DRAMÁTICA BÚSQUEDA
La búsqueda de la pequeña comenzó ayer, a las 7 de la mañana, cuando fue sustraída de la Sala de Maternidad del Hospital Juan Domingo Perón, de la localidad salteña de Tartagal, ubicada a 365 kilómetros al norte de la capital salteña y apenas a 50 kilómetros de la frontera con Bolivia.
En un momento dado, los padres de la beba, que nació el jueves a la tarde, se tuvieron que retirar al baño, y al regresar, apenas cinco minutos después, advirtieron que la niña no se encontraba en la cuna, por lo que rápidamente dieron aviso al personal del centro de salud.
Al tomar conocimiento del caso, la médica de guardia alertó al personal de seguridad del hospital y reportaron el hecho al Sistema de Emergencias 911, por lo que inmediatamente intervino la Policía y desde Asuntos Legales del establecimiento se presentó la denuncia formal a la fiscalía de turno.
Según las fuentes, la policía tomó conocimiento del hecho a las 7.16, por lo que se desplegó un operativo de búsqueda en el hospital y en los diferentes medios de transporte y rutas, con personal de la policía local, de Gendarmería Nacional y la Policía Federal.
Anoche, el procurador general Pedro García Castiella, en atención a la gravedad que reviste la sustracción de una menor de edad de un hospital y la necesidad de un abordaje integral y urgente de la situación, conformó una Unidad Fiscal, integrada por los fiscales penales Rafael José Medina, Pablo Cabot y Lorena Martínez, quienes, de manera conjunta, tomaron la investigación del caso.
En el marco de la intensa búsqueda desplegada, esta madrugada se logró dar con la pequeña, que de inmediato fue trasladada al hospital, donde se reencontró con sus padres y recibió atención médica.
ALERTA SOFÍA
En la tarde de ayer, el Ministerio de Seguridad de la Nación, en coordinación con el Sistema Federal de Búsquedas de Personas Desaparecidas y Extraviadas (Sifebu), emitió el Alerta Sofía por la desaparición de la pequeña, que mide de 50 centímetros, pesa 2,920 kilogramos y como señas particulares, que posee ojos negros y un lunar en la mejilla derecha.
Alerta Sofía es un sistema de comunicación de emergencia rápida para el reporte de desapariciones de menores de edad en situaciones que presenten un alto riesgo inminente sobre su integridad física y biopsicosocial.
Constituye una herramienta que pretende aumentar las capacidades de búsqueda y recupero de niñas, niños y adolescentes desaparecidos.
Este mecanismo, llamado Sofía en alusión al caso de desaparición de Sofía Herrera, es similar al modelo norteamericano conocido como Alerta Amber, y también adoptado en otros países.
La coordinación del Programa del Alerta Sofía se encuentra a cargo del Sistema Federal de Búsqueda de Personas Desaparecidas y Extraviadas (Sifebu), del Ministerio de Seguridad de la Nación.