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Acusan a Alberto Fernández de nombrar en una central nuclear a una peluquera que conoció en Facebook
Revelaron que Alberto Fernández conoció a una peluquera por Facebook y la nombró para un importante puesto. Los detalles.
En medio del escándalo de Alberto Fernández tras la denuncia por violencia de género de Fabiola Yáñez, nueva información comenzó a filtrarse sobre lo que ocurría durante el mandato del expresidente. Ahora, salió a la luz que el ex Jefe de Estado había nombrado a una peluquera que conoció por redes sociales para un importante puesto.
Según reveló Clarín, se trata de una peluquera identificada como Yolanda Araujo que Alberto Fernández habría conocido a través de Facebook. La mujer fue contratada para trabajar en Nucleoeléctrica, empresa de generación eléctrica que opera Atucha I y II.
Según trascendió, cobra $2 millones por mes.
Quién es Yolanda Araujo, la peluquera que nombró Alberto Fernández
Yolanda Araujo, de 44 años, conocida por sus vecinos de Lima, Zárate, no es una ingeniera ni tiene un currículum que justifique su presencia en una de las empresas más críticas del Estado. Sin embargo, desde 2021, ocupa un puesto administrativo en Nucleoeléctrica, donde los sueldos son naturalmente altos.
Fuentes del sector aseguran que su designación se realizó a dedo por el mismísimo Alberto Fernández, quien la conoció a través de Facebook. Sin embargo, encontrar a Yolanda Araujo en internet es imposible: todas sus redes sociales fueron eliminadas y no queda ni rastro de su pasado.
Aquellos que trabajan cerca de ella afirman que su ingreso a la planta fue visto con sorpresa, especialmente por su llamativa vestimenta. “Llegó con botas bucaneras y minifalda, algo completamente inadecuado para una planta nuclear”, comentó una fuente que trabaja en la empresa a periodistas del diario Clarín.
Sueldo millonario y cero experiencia
A pesar de no cumplir con los requisitos básicos para ingresar a Nucleoeléctrica, Araujo fue incorporada gracias a un pedido directo de la Presidencia.
Con un salario mensual de $2 millones mensuales, su trabajo consiste en tareas administrativas que podrían realizarse en cualquier empresa, pero en un lugar tan delicado como una central nuclear, su nombramiento genera indignación.