Domingo 24 de agosto de 2025
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Australia analiza un sacrificio masivo de canguros para evitar que mueran de hambre

Grupos ecologistas australianos proponen un sacrificio controlado de canguros para prevenir un sufrimiento masivo debido a la superpoblación y la posible escasez de alimentos. Sin embargo, este enfoque genera controversia en relación a los derechos de los animales y la utilización comercial de los canguros.

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Ante una superpoblación de canguros en Australia, grupos ecologistas proponen un sacrificio controlado para evitar una muerte masiva por inanición.

La crisis de los canguros en Australia

En Australia, millones de canguros podrían enfrentar una muerte por inanición si no se controla su creciente población, advierten grupos ecologistas. Proponen un sacrificio controlado de estos marsupiales, símbolo del país, para evitarles un sufrimiento masivo.

El ciclo de reproducción del canguro puede llevar a una población de decenas de millones después de una buena temporada de lluvias. Sin embargo, también pueden morir de forma masiva cuando la comida se agota.

El sufrimiento de los canguros durante las sequías

“Durante la última sequía, estimamos que entre el 80% y el 90% de los canguros murieron en algunas zonas”, explicó la ecologista Katherine Moseby. Según Moseby, sacrificar canguros de manera controlada sería una forma compasiva de evitarles sufrimientos atroces y una estrategia para controlar su población.

El debate sobre el control de la población de canguros

El gobierno australiano protege al canguro, pero las especies más comunes no están en peligro de extinción, lo que significa que pueden ser cazadas con autorización en la mayoría del territorio.

El sacrificio comercial de los canguros

Cada año, hasta cinco millones de canguros son sacrificados por su carne o su cuero. Dennis King, de la asociación de la industria del canguro de Australia, sostiene que la población de canguros pronto podría superar los 60 millones.

Por otro lado, organizaciones de defensa de los animales condenan el sacrificio comercial como una «matanza cruel» y presionan a las grandes marcas de ropa deportiva para que dejen de usar el cuero de canguro en sus productos.

En conclusión, el dilema de la superpoblación de canguros en Australia despierta un intenso debate entre la necesidad de control poblacional y la defensa de los derechos de los animales.

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