Dejaron en libertad al remisero detenido en la investigación por el robo de un avión

Por disposición judicial el remisero detenido en la investigación por el robo de un avión del Aeroclub de Villa Ángela quedó en libertad, pero sigue vinculado a la causa. Además, se dispuso devolver el dinero, pesos y dólares, que se habían secuestrado en el allanamiento a su domicilio. También le reintegraron los celulares. No trascendieron detalles de la decisión judicial y se mantiene el hermetismo en la tarea que lleva adelante la Policía y la justicia.

Investigación

El análisis pormenorizado de videos de cámaras de seguridad permitió a los investigadores el movimiento sospechoso de un Renault 18, bordó, con un cartel de remises ubicado al pie del parabrisas en el sector interior. El rastreo permitió ubicar un domicilio que se mantuvo bajo discreta vigilancia.

En la madrugada del miércoles 25, con orden judicial, se realizó la diligencia. Secuestraron el auto, se lo preservó y se puso a disposición del Gabinete Científico del Poder Judicial. El informe de los peritos será enviado luego al fiscal y al juez de la causa.

Luego, alrededor de las 14 de ese miércoles, policías allanaron la casa del remisero, de 52 años, que quedó detenido. Encontraron y secuestraron 22 mil dólares en fajos de billetes de 100. También incautaron $282.600 en fajos, una billetera marrón, 3 celulares, 1 blíster porta chip, 1 pendrive y anotaciones.

Con los elementos secuestrados se debía establecer si tiene vínculos con la banda que robó el avión. Oficialmente no hay información por la puesta en libertad del hombre y la restitución de todo lo secuestrado. Lo señalaban como un sospechoso de la conexión local de la banda.

Robo y accidente

El siniestro ocurrió en la madrugada del miércoles 18 de enero, alrededor de las 2, en una zona rural conocida como Lote 11, distante a unos 7 kilómetros al norte del casco urbano de la ciudad de Villa Ángela, dijeron fuentes policiales.

Un peón del campo donde ocurrió la tragedia al escuchar ruido de un motor salió a mirar y observó volar a baja altura a un avión. Describió que parecía que el motor arrancaba y se detenía. Después escuchó una fuerte explosión seguida de un incendio por lo que de inmediato llamó al 911.

Instantes después llegaron policías y bomberos, que sofocaron el fuego. La máquina se había desmantelado al arrastrarse unos 200 metros y en el final se incendió. En el trayecto despidió a una de las personas y otros cuatro quedaron carbonizados entre los restos calcinados. Partes de la máquina quedaron esparcidos en la escena de la tragedia.

En los primeros datos sobre la información trascendió que en los restos del avión hallaron una pistola calibre 9 milímetros, un teléfono satelital, billetes de moneda paraguaya y una gorra del Club Cerro Porteño, lo que llevó a los investigadores a presumir que los fallecidos eran de nacionalidad paraguaya.

Rápidamente ante la magnitud del hecho, efectivos de distintas dependencias de la Policía provincial junto con el fiscal Sergio Ríos comenzaron a trabajar en el caso. También se sumó la Gendarmería y la Policía Nacional del Paraguay. La ministra de Seguridad y Justicia del Chaco, doctora Gloria Zalazar junto a su equipo de gabinete se trasladó a Villa Ángela para seguir de cerca las tareas y aportar los recursos necesarios a la investigación. También concurrieron el subjefe de la Policía del Chaco, comisario general David Vega y la cónsul paraguaya Diana Arrellaga.

Por el momento solo identificaron a Abel Alexander Quiroga Vera (26) que había sido despedido y su cuerpo no quedó afectado por el fuego.